dijous, 27 de desembre del 2012

PUBLICO EN EL PERIÓDICO: "INCENDIS", LA CONSTRUCCIÓN SOCIAL

No es fácil desarrollar una identidad invidual y colectiva que incluya todo aquello que somos

Jueves, 27 de diciembre del 2012 
 SAÏD EL KADAOUI
Recientemente he viajado a Panamá para participar en unas jornadas sobre adolescencia e identidad. En esta etapa de la vida, la búsqueda de la propia identidad se pone en marcha y necesita de un entorno que les invite a no conformarse con respuestas unívocas y los anime a explorar su propia complejidad. La gran mayoría de la población es consciente de que, pese a sus orígenes diversos, todos son panameños. En Europa, en cambio, solemos definirnos y definir al otro solo en función de su origen. Nos cuesta mucho considerar europeos a muchos de los hijos de las últimas migraciones. Esto tiene consecuencias. Una es que en periodos de crisis, mucha gente se siente tentada a considerarse con más derechos que el resto y se normaliza el discurso xenófobo. Primero los de casa, como si esta casa no fuera la de todos.

 CATALUNYA no es una excepción. Aquí nos cuesta pensar en un niño que se llame Mohamed como catalán. Pero tener el catalán como lengua vehicular en las escuelas ha facilitado que no se segregue a nadie por razones de lengua. El resultado es que todos los que cursan su escolaridad en Catalunya acaban hablando catalán y castellano. Los hijos de las últimas migraciones también. Esto contribuye a que las personas que vinimos de otros lugares del mundo nos sintamos catalanes. ¿Por qué entonces Wert nos presenta un proyecto de ley que quiere cargarse una de las cosas que ya funcionan bien? Nuevamente, las tensiones identitarias. El nacionalismo recalcitrante siempre quiere someter al otro. Colonizarlo. Transformarlo. Borra sus particularidades. Desarrollar una identidad individual y colectiva suficientemente amplia como para incluir todo lo que somos no es fácil. Si no lo hacemos, dejamos de herencia una vida y una sociedad fragmentadas.
 En su ensayo Reflexiones sobre el exilio , Edward Said cita a Hugo San Víctor: «El hombre a quien su tierra natal le parece dulce es aún un principiante tierno; aquel para quien toda la tierra es su tierra natal es ya fuerte; pero el hombre perfecto es aquel para quien el mundo entero es una tierra extraña». Asumir esta extrañeza es muy difícil. Nos da miedo. Tendemos a proyectarla en el otro y entonces la maquinaria del odio se pone en marcha.
 Hace unos meses vi en el Romea la obra Incendis . Tres horas y cuarto de adrenalina, de sentimiento, de preguntas, de confrontación con una realidad dura. Salí trastocado, sacudido, emocionalmente agotado pero, a pesar de todo, feliz por lo vivido. Una obra de teatro que bien podría ser un toque de atención, un reflejo de aquella parte del alma humana que nos ocupamos de ocultar, de apartar y de proyectar en los demás. Dos hijos gemelos que se ven obligados a indagar la historia de una madre que después de su muerte les anuncia, vía notario,ue hay un padre y un hermano que se deben encontrar. Dos países en los que buscar. La inevitable búsqueda de los orígenes para poder seguir viviendo.
 «La memoria está ligada a la capacidad de mirar de frente los traumas colectivos», dice el autor, Wajdi Mouawad , dramaturgo libano-canadiense. Eso es lo que tendrán que hacer Simon y Jeanne –los gemelos– y lo que ha tenido que hacer la madre
 –Nawal– que, al conseguir cerrar el círculo de su vida, se encuentra con una verdad que la lleva al silencio y posteriormente a la muerte. La historia de una generación no se acaba con ella. Le sigue otra que tiene que hacer parte del trabajo si no quiere caer en las mismas trampas. De eso no se encarga ninguna sociedad. Ninguna persona. Nazira, laabuela de Nawal, le suplica que aprenda a ser, a luchar, a leer, a pensar, a no conformarse para romper el hilo del odio que conlleva una vida sin belleza a su alrededor.

 EN UNO DE LOS pasajes de la obra, el médico de un orfanato donde habían ido a parar Nawal y su amiga Sawda les dice que se han llevado los niños de allí. «¿Por qué?», le pregunta Sawda. Y la respuesta no podía ser más lúcida. «Para vengarse. Hace dos días, los milicianos colgaron a tres refugiados adolescentes que se aventuraron fuera de los campos. ¿Por qué colgaron los milicianos a los adolescentes? Porque dos refugiados del campo habían violado y matado a una chica del pueblo. ¿Por qué violaron aquellos dos hombres a la chica? Porque los milicianos habían lapidado a una familia de refugiados. ¿Por qué (...)?
 La historia puede proseguir aún mucho más tiempo, de hito en hito, de cólera en cólera, de pena en tristeza, de violación en asesinato, hasta el comienzo del mundo. Me atrevo a decir que nos conviene ver esta obra, leerla, nos conviene descubrir a Wajdi Mouawad porque de lo que se trata es de saber que a todos nos habita la belleza y la fealdad, el amor y el odio, la luz y la oscuridad, el bien y el mal. Nos conviene saberlo para hacer frente al hijo del odio.
 Hacer frente al odio –y no negarlo– es lo que a los niños les puede permitir llegar a vivir en una sociedad más inclusiva.

 Psicólogo y escritor
 Leer en El Periódico, pincha aquí

Llegir en català a El Periódico, clica aquí 

dimarts, 25 de desembre del 2012

SOMBRAS, en el Diario.es, El Diari de la Solidaritat

Publico este artículo en  Catalunya Plural, de El Diario.es,

En este último trimestre del año muchas personas han intentado llegar de forma desesperada a Europa. Algunas han saltado la valla de Melilla y otros han emprendido un viaje muy arriesgado en patera. Algunas han dejado su vida en el camino y otros han conseguido su objetivo a un precio muy alto.
La tragedia se hace más grande aún cuando se piensa en lo que les espera en su destino anhelado.
Decía Edward Said que el exilio es algo curiosamente cautivador cuando se piensa, pero terrible de experimentar. Es una grieta imposible de cicatrizar que se impone entre un ser humano y su lugar natal. Nunca, decía, se puede superar su esencial tristeza.
Pensar en el propio exilio (autoexilio, si se quiere) es un lujo. La verdad es que la mayoría de estas personas vivirán una pesadilla eterna. Sus expectativas y deseos obtendrán una sonora bofetada de la realidad.
Si aún no han tenido la ocasión, los animo a que vean el extraordinario documental de Oriol Canals: 'Sombras'. (pincha aquí para ir a su web) Un magnífico acercamiento a las vidas de un grupo de personas, todos hombres negros, inmigrantes, la mayoría de ellos indocumentados, que malviven en el pueblo de Alcarràs (Lleida).
Esta película ha merecido los elogios de algunos medios franceses. He leído excelentes críticas aparecidas en Le Monde, Le Canard Enchainé y La-Croix, y he visto también la entrevista que le realizaron al director en France 24. Y me consta que otros medios de ese mismo país han hablado también de este filme de forma muy elogiosa.
En nuestro país, en cambio, no se ha producido ninguna reacción. Ninguna crítica. Y me gustaría contribuir a deshacer este silencio.
Oriol Canals nos ha dado una magnífica oportunidad para seguir de cerca a algunas de estas personas que en su día franquearon la valla de Melilla, cruzaron a pie buena parte de África, viajaron en una patera hasta territorio español y perdieron amigos por el camino y compañeros de viaje, pensando que acabarían encontrando una vida digna.
No era fácil conseguir acercarse a ellos como lo ha hecho este realizador. Se trata de personas que desconfían, que se sienten perseguidas, que quieren mantener su dignidad callando y no llorando y denunciando que son víctimas de una de las injusticias más grandes ... Su trabajo paciente, un total de siete años, ha dado un magnífico resultado: consigue mostrarnos a la persona que hay detrás del inmigrante indocumentado.
Y con el corazón compungido le escuchas decir a una de estas personas que aquí, en Europa, al contrario de lo que pensaban, hay lista de espera. No es llegar y despegar. Se trata de llegar y esperar. Otro de estos hombres le dice al director que la vida es aquello que tú haces. "Tú, por ejemplo, has encontrado tu forma de vida haciendo películas. Pero yo no tengo ningún tipo de vida. Yo no hago nada".
Vivir esperando, deambulando sin saber a dónde ir, qué hacer, buscando, pensando, sin poder dejar de hacerlo, en la gran decepción europea, en la familia que dejaron atrás, en los muertos que se quedaron en alguna parte del desierto o en el fondo del mar, en los documentos que deben reunir para intentar legalizar su situación, en los contratos falsos que deben pagar... Éste es el destino de muchas de las personas que lograron su objetivo de entrar en Europa.
Algunos de ellos acceden a sentarse delante de la cámara y hablar a sus familias. Casi todos ellos se refieren en un momento u otro a Dios. Es él quien dispone las cosas y él quien puede cambiar su situación. Sorprende en un primer momento, pero a medida que los vas escuchando entiendes que si no tuvieran fe en Dios, en la trascendencia, hubieran enloquecido por el efecto de la rabia, la nostalgia, el rechazo y la injusticia.
El filme es magnífico porque consigue tratar con mucha dignidad a sus protagonistas, no cae en el victimismo, nos muestra la complejidad de unas personas que viven en los márgenes y que han entendido que no hay salida, que su viaje les ha llevado a un lugar difícil, agreste, pero, sorprendentemente, se mantienen de pie y no dejan de luchar.
Y si ellos no han perdido la esperanza, no lo hagamos nosotros. Vean este filme para aprender algo de estas sombras con las que nos topamos a diario. Yo sigo impactado.
Somos muchos los que venimos diciendo desde hace un tiempo que, si aceptamos el maltrato y la exclusión de los inmigrantes, estamos abonando el terreno para que algún día nos toque a nosotros también. Y, efectivamente, esta crisis nos está demostrando que la gran mayoría de la población es vulnerable. La pobreza ha dejado de sernos ajena.

Trailer del film.
                                          OMBRES
En aquest darrer trimestre de l'any moltes persones han intentat arribar de forma desesperada a Europa. Algunes han saltat la tanca de Melilla i d'altres han emprès un viatge molt arriscat en pastera. Algunes han deixat la seva vida pel camí i d'altres han aconseguit el seu objectiu a un preu molt alt.
La tragèdia es fa més gran encara quan es pensa en allò que les espera en el seu destí anhelat.
Deia Edward Said que l'exili és quelcom curiosament captivador quan s'hi pensa, però terrible d'experimentar. És una clivella impossible de cicatritzar que s' imposa entre un ser humà i el seu lloc natal. Mai, deia, no es pot superar la seva essencial tristesa.
Pensar en el propi exili (autoexili, si es vol) és un luxe. La gran veritat és que la majoria d'aquestes persones viuran un etern malson. Les seves expectatives i desitjos obtindran una sonora bufetada de la realitat.
Si encara no han tingut l'ocasió, els animo a que vegin l'extraordinari documental d'Oriol Canals: Sombras. Un magnífic apropament a les vides d'un grup de persones, totes elles homes negres, immigrants, la majoria d'ells indocumentats, que malviuen en el poble d'Alcarràs (Lleida).
Aquesta pel.lícula ha merescut els elogis d'alguns mitjans francesos. He llegit excel.lents crítiques aparegudes a Le Monde, Le Canard Enchainé i La-Croix i he vist  també l'entrevista que li van realitzar al director a France 24. I em consta que altres mitjans d'aquest mateix país han parlat també d'aquest film de forma molt elogiosa.
Al nostre país, en canvi, no s'ha produït cap reacció. Cap crítica. I m'agradaria contribuir a desfer aquest silenci.
Oriol Canals ens ha donat una magnífica oportunitat per seguir de prop algunes d'aquestes persones que en el seu dia van franquejar la tanca de Melilla, van creuar a peu bona part de l'Àfrica, van viatjar en una pastera fins territori espanyol i van perdre amics pel camí i companys de viatge, pensant que acabarien trobant una vida digna.
No era fàcil aconseguir apropar-se a ells com ho ha fet aquest realitzador. Es tracta de persones que desconfien, que se senten perseguides, que volen mantenir la seva dignitat callant i no plorant i denunciant que son víctimes d'una de les injustícies més grans... El seu treball pacient, un

divendres, 21 de desembre del 2012

RECOMANO "AMOR A LA CARTA" DE XAVIER RIUS

Recomano la novel·la "Amor a la carta" de Xavier Rius, editada recentment per Raima. Un llibre per gaudir i per regalar aquestes festes.

En Joan, un carter divorciat que l'any 1996 treballa a L'Hospitalet, canvia de ruta de repartiment i li arriben de tant en tant cartes per un tal Andreu Roca a una casa que s'ha enderrocat i en el remitent només s'hi llegeix "Olga". Intrigat per la reiteració d'aquestes cartes que, en no haver-hi adreça del remitent, es retornen a unes saques que al cap d'un temps són destruïdes, un dia n'obrirà una, llegirà com l'Olga enyora l'Andreu i els moments meravellosos que va viure amb ell i lamenta no haver-lo pogut ajudar, no haver pogut salvar aquella relació. N'obrirà més, s'dentificarà plenament amb les cartes de l'Olga i iniciarà una cerca d'aquesta Olga de la que ja no es podrà fer enrere. 
Una història que enganxa, amb tombs inesperats o no tot és el que sembla, però finalment tot encaixa i amb final esperançat.

ON COMPAR AMOR A LA CARTA

Pots trobar segur la novel·la Alibri (Balmes Universitat, abans Herder) a ABACUS de L'Hospitalet i Vic, a Perutxo de L'Hospitalet, a Llibreria Catalònia (Rnda St Pere, 3), a La Central del Museu d'Història de Barcelona, carrer Llibreteria, (clica per veure disponibilitat)  a la del  Raval i carrer Mallorca, a Proa (Rosselló 212), també a a Santos Ochoa de Fabra i Puig, 165, entre Virrei Amat i Meridina, i a la  LLibreria 22 de Girona (on la presentaré amb en Xavier i la Iolanda Pineda l'11 de gener) i altres ABACUS


Fragment del capítol segon:


...Cada matí, només arribar a correus, classificava encuriosit les cartes cercant-ne una de nova, mentre em retreia no haver obert les anteriors. Més tard, quan en fer el repartiment passava pel descampat ple de bassals del carrer Cartago, on abans hi havia aquelles torres, em preguntava per quins set sous les continuava enviant allà, em preguntava per què escrivia a l’Andreu, em preguntava què se n’havia fet. Uns dubtes que no s’acalaririen uns dies més tard quan va arribar a les meves mans una segona carta.  




                                                        Dimarts, 5  de novembre de 1996

Hola, Andreu,

Avui he anat a sopar al restaurant xinès  que tant ens agradava. Aquell on havíem anat tantes vegades, aquell on després de repetir-me que allò no tornaria a passar, que mai més no em tornaries a fer mal, em vas demanar perdó i jo et vaig prometre que estaria sempre al teu costat per ajudar-te. Moltes vegades m'hi havia aturat al davant, però fins avui no he estat capaç d’entrar-hi. Una força superior m'ho impedia; la por de trencar els nostres records, el ressò encara present de les teves paraules, esdevenien un mur més fort que la meva voluntat.

            En traspassar la porta, han sonat les campanetes. Te'n recordes? Que en són de boniques! No estava ple, només hi havia vuit o deu persones. Taula només per un, senyora? m'ha preguntat la cambrera, com si es recordés de tu, com si notés la teva absència. M'ha acompanyat fins a la taula del racó, sota el quadre del riu, els cedres i les barques, la nostra taula, la de sempre. He rellegit el meú de nit dues vegades. Amanida  xinesa, arròs amb gambes i verdures, pollastre al curry i vi rosat, he triat. M'havia assegut de cara a la porta, però, cada vegada que s'obria, quelcom se'm movia per dins, com si esperés la teva arribada. Encara no m'havia pres la meitat de l'amanida, quan se m'ha fet un nus a l'estòmac. Llavors m'he canviat de cadira, de cara a  la peixera, en el teu lloc. M’ he begut d'un glop mig got de vi, he tancat uns instants els ulls i he recordat allò que em vas dir quan pensaves que potser em deixaries, que calia que continués sempre endavant. He reprimit les ganes de plorar  i  m'he limitat a observar l'anar i venir, pausat però constant dels peixos; aquells peixos vermells que deies que podien viure seixanta o setanta anys, que envellirien amb el nostre amor.

             Quan m'han portat el segon plat m'he adonat que em mancava alguna cosa. He anat a la màquina i he comprat un paquet de tabac. He encès una cigarreta. Només he fet  quatre o cinc calades, jo continuo igual, gairebé no fumo, ja ho saps. El que m'agrada és l'olor i la dansa del fum i mentre es consumia lentament en el cendrer, mentre la seva aroma es fonia amb les olors de las gambes, les verdures i el curri, l'angoixa que em premia l'estòmac s'ha anat esvaint.

            Tu no hi eres, i l'ampolla de vi per a mi sola ha estat massa. M'ha pujat una mica. Si t'hagués tingut al meu costat hauria rigut, potser hauria deixat anar algunes d'aquelles bestieses tan meves, però la melangia de tu, l'enyorança d'un passat al que m'agafo, m'ha envaït dolçament sense fer preguntes, sense necessitat de respostes.
            No m'he acabat el pollastre. Faltaves tu i no t'has pres el que sobrava. Després de postres, gelat de vainilla amb nous, com sempre. He anat al lavabo i m'he pintat els llavis, com a tu t'agrada. Però, en tornar cap a la taula, m'he vist reflectida al mirall de darrera la peixera, sola, sense ningú que m'esperés per picar-me l'ullet o llençar-me aquell petó que jo rebria complaguda.
            He caminat sense pressa fins a casa, mentre em retreia per què et vaig  perdre, mentre em retreia els errors que vam cometre. Tu no has pujat. Estava, millor dit, estic encara, una mica beguda. Estirada al sofà, m'he descordat la brusa i m'he deixat abraçar per records de tendresa. M'acaronava i tu et gronxaves pels meus sentiments. T'he esperat en va, tu no venies. Després he anat al llit, he intentat dormir i no podia. I ara, desvetllada, t'escric per retrobar-te.
            Saps? Dissabte passat vaig anar a Sant Medir i la Font Groga. La tardor avança i els castanyers i els roures de Collserola ja han perdut els grocs; ara són ben marrons. Diumenge farà deu anys que allà, a la font, em vas dir per primer cop t'estimo. Jo, com cada any, hi aniré i t'enyoraré mentre contemplo com els arbres es despullen i perden les fulles.                              
            Olga
 

dilluns, 26 de novembre del 2012

RECOMANO "MIL CRETINS" DE QUIM MONZÓ

,
Cita del seu relat titulat Miro per la Finestra:
 "Durant tota aquesta estona que fa que estic mirant per la finestra, no he pensat en la feina, ni en la família, ni en cap dels molts problemes que de nit no em deixen dormir. (...). Faig tot el que puc per corregir el curs dela realitat, i preveure-ho tot perquè, si evito que hi hagi cap ensurt, l'endemà resulti més suportable. Però preveure-ho tot em produeix un desassossec desmesurat, que fa que les coses em passin pel davant com una exhalació, sense furir-ne. No frueixo del petó sinó quan ja és passat; aleshores el record de grat".

Quim Monzó: 'La literatura catalana aguanta, és de primera qualitat, allò que no aguanta és el país'

VilaWeb ofereix una entrevista extensa amb l'escriptor, que farà el discurs inaugural de la cultura catalana a la Fira del llibre de Frankfurt

Quim Monzó, (Barcelona, 1952) fa el discurs inaugural de la cultura catalana a la Fira del llibre de Frankfurt. En aquesta entrevista parla del seu procés creatiu, de com ha trobat el seu model de llengua, i del canvi de paisatge dels seus contes: ja no són els bars, sinó els hospitals. També parla del nou llibre que és a punt de publicar, 'Mil cretins', i de la nova etapa que ara comença. Tot això sense deixar de prendre posició crítica sobre les realitats literàries, socials i polítiques que l'envolten i que el preocupen.

—L'editorial Frankfurter acaba de publicar '100 contes', volum que aplega tots els contes publicats fins ara. L'ha presentat al Festival Internacional de Literatura de Berlín. Com va anar?
—A Berlín vaig participar en un acte, i hi vaig llegir un fragment d'un conte, 'L'accident'. I després un actor va llegir en alemany el conte sencer. Què va passar? Que em vaig enamorar d'aquell actor. Era un senyor de cabells blancs, que va llegir perfectament el text, sense sobreactuar. A Catalunya, quan et diuen que un actor llegirà un conte teu, tremoles i dius: Oh, no!, si us plau! Que vingui Satanàs i se m'endugui, perquè no vull que un actor llegeixi contes meus. Sempre he mirat que m'ho fessin periodistes, de ràdio i televisió. Perquè m'estimo més un periodista que llegeix un informatiu amb fredor que no pas un actor que sobreactua. Què tenen els alemanys? Uns actors especialitzats a fer lectures, que llegeixen meravellosament bé, pronuncien les paraules perfectament, en un to neutre; quan hi ha un diàleg, exageren una mica el to per marcar la diferència amb el narrador, però de seguida tornen al to fred, gens sobreactuat. Són una meravella. Em vaig enamorar d'aquesta manera de llegir. I els catalans n'haurien d'aprendre. Nosaltres no en tenim el costum, perquè hi ha molt poca tradició de llegir narrativa en veu alta.

—La bona literatura ha de poder aguantar la lectura en veu alta?
—La literatura que m'agrada, sí que ha d'aguantar una lectura en veu alta. Això no vol pas dir que hi hagi un llibre il·legible en públic, però que sigui un grandíssim llibre. Ara corregeixo galerades d'un nou llibre que sortirà, calculo, a final del mes d'octubre. I què faig, en aquesta última repassada? El llegeixo en veu alta. Ho faig sempre. Perquè t'adones de molts errors: de cacofonies, de repeticions, de rimes internes... I pots canviar una paraula perquè soni millor en la lectura. Si sona millor llegit en veu alta també sona millor en la lectura interior del lector. Per tant, li facilites la feina. M'agraden els llibres que es poden llegir en veu alta, que s'entenen i que tenen ritme. Aquest ritme de lectura que és apassionant, si és bo.

—En l'acte del Festival Internacional de Literatura de Berlín el públic també hi va intervenir. Què els va interessar de la seva literatura?
—Una de les coses que més va comentar la gent que havia llegit el llibre (també me la van preguntar molts periodistes alemanys) és aquesta: 'Per què desaprofita cent idees fent cent contes, si en sortirien cent novel·les? Si podria passar tota la vida desenvolupant aquestes idees?' Vaig pensar: No, o no enteneu què és un conte o no enteneu el goig que és un conte i el goig que és escriure curt. Que moltes d'aquestes idees es podrien allargar, sí; però seria com allargar un xiclet.

—Que li diguessin que escriure cent contes era desaprofitar cent idees el devia molestar molt. Perquè vostè se n'ha fet tips, de defensar el conte com un gran gènere, contra els qui el consideren un gènere menor.
—A mi, allò que em fa riure és aquesta idea tan antiga, tan avorrida, que diu que el conte és un gènere menor; que el gran gènere és la novel·la. No, el conte és un gènere esplèndid. No diré pas que el conte sigui el gènere bo i la novel·la el gènere caduc. Hi ha novel·les boníssimes, poca broma! Hi ha autors més radicals: Jorge Luis Borges, que mai no va escriure cap novel·la, va escriure contes tota la vida; abominava la novel·la. Deia que no havia llegit mai una novel·la que no en sobrés, si més no, un terç. Que hi havia molta palla. I en Giorgio Manganelli deia: 'Les novel·les són vuitanta línies de text i tres metres cúbics d'aire. Jo trec els tres metres cúbics d'aire i deixo les vuitanta línies de text.' Ells eren més radicals en això, però s'entén. Hi ha molta palla en la novel·la. En l'últim llibre que he publicat fins ara, 'El millor dels mons', al cos central hi ha una novel·la que es diu 'Davant del rei de Suècia'. Fa cent pàgines justes. Però quan el vaig acabar en feia cent setanta vuit o cent vuitanta. Llavors vaig començar a repassar i a treure tot allò que podia eliminar, fins a convertir-la en una novel·la curta.

—Publicar a l'alemany '100 contes' és una magnífica presentació i un recull de la seva literatura, perquè conté tota la seva trajectòria, dels primers contes de 'Uf, va dir ell', de l'any 1978, fins als contes de 'El millor dels mons' del 2001.
—Totalment. L'holandès Cees Nooteboom en un article explica com tot escriptor que comença estableix uns lligams de complicitat amb el seu públic natural. En el meu cas, aquests lligams es van establir amb el públic català. I són uns lligams en què vas creixent, vas canviant d'opinions, vas madurant, i el teu públic et segueix o no et segueix, però també canvia, madura, s'eixampla. Però tothom sap clarament amb quins llibres has començat i quin és l'últim. En canvi, quan entres en un país estranger, poques vegades comences publicant el primer llibre que has escrit. Comences per l'últim o per un del mig. Això fa que el públic lector d'aquest altre país no estableixi amb tu aquesta mateixa complicitat, de la mateixa manera. Perquè aquest públic ignora l'evolució que has fet des dels inicis. I amb aquests '100 contes', sí que es veu l'evolució.

—Quina evolució estilística hi ha en els seus contes del 1978 al 2001?
—A 'Uf, va dir ell' i a 'Olivetti, Moulinex, Chaffoteaux et Maury', hi trobo aquesta borratxera d'adjectius que és molt típica de la joventut. Quan descobreixes que no necessàriament has de fer servir els adjectius obvis, com ara 'neu blanca' o 'carbó negre', i pots dir 'neu insípida', un adjectiu que descol·loca una mica, penses: 'Collons, que bé que escric!' I t'emborratxes i comences a fer servir adjectius constantment, constantment. Això he vist que passa a molta gent quan comença. I en aquesta època, jo ho feia molt i molt. Per una altra banda, veig que la idea del conte, ja la tinc formada. Hi ha la idea que un conte és una unitat, una cosa a mig camí entre el relat i el poema. És clar, el 1978 ja havia publicat dos llibres: 'Self Service' i 'L'udol del griso al caire de les clavegueres', dos llibres que no he reeditat mai. Perquè crec que em van servir per anar-me equivocant en moltes coses i anar-ne aprenent. Després, a partir de 'L'illa de Maians', hi ha un procés progressiu d'aprimament del conte. Si no cal fer servir adjectius, perquè no afegeixen res a la història, no es fan servir. I 'El perquè de tot plegat' és summament esquemàtic, és molt fred. Diria que arribo al límit del fet esquemàtic. Després a 'Guadalajara' hi ha un procés una mica més estrany: no tornen els adjectius, però comença a complicar-se la frase. Es torna a engreixar la història i començo a fer una cosa que no feia abans, que és anar-me'n per les branques, una mica. A 'El millor dels mons' les branques són molt més evidents. En algun conte començo amb una història i després m'embranco i me'n vaig de la història inicial i acabo en una altra banda. I això em dóna un cert gust perquè és nou. Si tota la vida fas les mateixes coses acabes avorrint-te. En aquests contes faig digressions i, aquestes digressions, no les reprimeixo. I en els contes del llibre nou encara hi ha més digressions, fins al punt que no sé si són realment contes o comencen a ser una altra cosa.

—Ha revisat els '100 contes' o el públic alemany en té la versió original?
—Els he revisats.

—Per quin motiu revisa la seva obra i no la manté tal com la va escriure en aquell moment?
—Per un fet bàsic, la situació de la llengua catalana. Quan jo començo a escriure, els meus models literaris són els llibres catalans que llegeixo en aquell moment. Però començo a treballar en premsa en català (el Món, Avui, Diari de Barcelona) i també en ràdio, i això és importantíssim. I m'adono que quan escric per la ràdio ho faig d'una manera molt diferent de quan escric un conte. I, per què per ràdio parlo normal, com parlem tots plegats, amb un cert gust per la llengua, no pura gasòfia, i en canvi quan em poso a escriure escric més refistolat? És una incongruència. Va ser un procés d'anar-me adonant que era absurd allò que feia. I això em va fer veure la necessitat de revisar tots els llibres. És una cosa que el lector alemany no percep, perquè ja va directe a la traducció, però per al lector català, i per a mi, és important per a fixar la llengua. En vint anys vaig trobar el model de llengua que volia i que no era l'inicial. L'inicial era un model de català postnoucentista, el que arrossegàvem amb en Pedrolo i que ja no anava. En canvi, el català de la ràdio serveix, si no cau en les aberracions de TV3. I és això que em fa rescriure. Perquè la meva llengua primera és molt dubitativa. I perquè jo, com a escriptor, vull que els meus contes siguin escrits en una llengua sensata. Que, quan d'aquí a vint anys, si és que ningú encara llegeix català, llegeixi els contes en una llengua que funcioni.

—Com veu el català ara?
—La situació és perpètuament plena d'interferències. Tens la sensació que cada vegada anem pitjor. Jo la tinc. Perquè surto al carrer i paro l'orella. Els polítics surten al carrer i no paren l'orella, perquè no volen veure la realitat. Perquè, si veuen la realitat, se'n va tot enlaire o han de repensar-ho tot. Els polítics són uns hipòcrites. Tots.

—I quina és la realitat?
—Que anem cap a l'occitanització, cap a l'irlandització. Serem un record. Jo tinc la

dimecres, 21 de novembre del 2012

EL VIAJE DE KALILU


 En los últimos meses mucha gente ha muerto en el estrecho, otros están atrapados en Marruecos malviviendo en los alrededores de Nador y Oujda y otros muchos se han quedado por el camino - muertos en el desierto, chantajeados por las mafias etc.-. Hace unos años escribí este artículo que no llegué a publicar en Público. Lo publico ahora en mi blog. Es mi pequeño granito de arena para que no nos olvidemos de toda esta gente.



Que la felicidad nunca puede ser completa es una lección elemental que cualquier persona descubre en algún momento de su existencia. No es necesario haber vivido grandes experiencias para darse cuenta de ello. En cambio, que la infelicidad tampoco puede serlo, lo descubrí leyendo a Primo Levi en su libro Si esto es un hombre.
Paso a explicarles el por qué de esta reflexión.
            Recientemente, he tenido la oportunidad de compartir mesa con Kalilu Jammeh. Él presentaba su libro, El viaje de Kalilu. Cuando llegar al paraíso es un infierno.De Gambia a España: 17345 Km en 18 meses, y yo debía hablar, a continuación, de la afectación psíquica que puede generar un proceso migratorio penoso.
Me sentí ridículo. Yo no podía añadir nada a lo que él nos estaba contando y, en caso de poder hacerlo, no tenía la certeza de poder expresarme bien. Temía emocionarme y tener que interrumpir mi intervención. Finalmente mi charla fue más corta de lo previsto y yo no, pero otra persona, la encargada de coordinar el acto, soltó las lágrimas que todos los asistentes al acto habíamos estado reprimiendo. Alguien sensato debía de hacerlo. Era tan doloroso lo que escuchar todo lo que nos explicaba que alguien debía de autorizarnos a parar y descargar la pena que sentíamos.
            Nos describió lo que él denomina un holocausto ignorado. El viaje que emprenden muchos africanos para llegar a Europa.  Nos hizo saber que solamente un 5% de los que se lo proponen llegan a su destino. El resto muere de hambre, son asesinados o se quedan por el camino. Pero ni el libro ni su presentación se quedan en las frías cifras. También nos contó hechos concretos: en Algeria lo detuvieron, pasó meses en cárceles infrahumanas y cuando lo dejaron en libertad, fue para llevarlo al desierto y abandonarlo allí a él y a otros muchos sin agua y sin comida. Es decir, pretendían matarlos. Al fin y al cabo se estaban quitando un problema de encima y le estaban ahorrando otro a la vieja Europa, cansada ya de tanto inmigrante. Él pudo salvarse gracias al dinero que guardaba con mucho celo y que le sirvió para pagar a un Tuareg para que lo salvara. (ya ven, allí donde haya miseria, florecen nuevos negocios). Otros no tuvieron tanta suerte. Vio morir a mucha gente y se encontró con  esqueletos y restos de cadáveres durante todo el camino, especialmente en Argelia y el Sáhara.
 Podría seguir relatando un sinfín de crueldades que a uno le hacen pensar si este es el mundo en el que queremos habitar, pero dejémoslo en que detrás de muchas de estas personas que llamamos inmigrantes hay un historia repleta de experiencias terribles. Sed, hambre, ahogos, enfermedades, puñaladas, robos, arbitrariedades, policías delincuentes, estados asesinos, mafiosos inhumanos etc.
            Me conmovió especialmente el agradecimiento con el que hablaba de la guardia civil de Lanzarote. Después de 18 meses de travesía (que fue lo que duró el viaje que, según los mafiosos a los que pagaron, debía de transcurrir en 15 días), los agentes de este cuerpo fueron los primeros que los trataron como a personas.
            La lección que extraje del libro de Primo Levi, me ayudó  a hacer más tolerable los sentimientos que iba experimentando. El  libro de Kalilu,  que se gestó como proyecto ya en la misma travesía para  explicar a toda la gente que lo quisiera leer la historia de tantos africanos que cometieron el error de soñar con un futuro, fue un motivo para no sucumbir a tanta infelicidad. Alguien tenía que explicar e intentar hacer justicia a los muertos que se encontró en el desierto y a los que iba dejando por el camino
            No hacía mucho había leído también la  excelente primera novela de Uzodinma Iweala, Bestias sin Patria, en la que se narra en primera persona la historia de Agu. Un niño listo que, empujado por las terribles circunstancias, se ve convertido en un niño soldado. Un relato de una violencia atroz que el autor empezó a concebir después de haberse encontrado en el Newsweek con la foto de un niño negro de brazos flacuchos que parecía mirar al mundo acusándolo de haberlo abandonado y al mismo tiempo suplicando el perdón. El pie de esta foto decía que había sido un niño soldado.
            Exactamente esto, un reproche por haber sido abandonado y una súplica de perdón por no haber podido salvar al resto de personas que viajaban con él, fue lo que me pareció ver en la expresión de Kalilu.    
            Comprendre cansa. Però mai no tant/  perquè no pugui ser l’últim refugi (comprender cansa, pero nunca tanto/ como para que no pueda ser el último refugio). Estos versos de Joan Margarit también acudieron a mi rescate y me animaban a escucharlo con atención.
Quizás nos parezca mejor cerrar los ojos y los oídos y seguir viviendo en nuestra burbuja europea (un narcótico muy potente) y pensar que vivimos en el mejor de los mundos y que los otros (los inmigrantes) deben de integrarse en nuestra sociedad sin hacer demasiado ruido y callando sus miserias para no devolvernos una imagen demasiado cruel de nosotros mismos. Quizás sí. Pero permítanme discrepar. Tenemos la obligación de saber en qué mundo habitamos. Porque, no nos engañemos, algo tenemos que ver con el sufrimiento de estas personas.
            Incluso para los que tengan la tendencia de pensar que la responsabilidad siempre está en un lugar muy lejano y que la miseria es debida a la corrupción de los otros, y que la mentira es responsabilidad de las mafias, formadas por unas almas crueles que nada saben de sentimientos, que las guerras en África son por cuestiones tribales que convierten a los africanos en lo que alguien denominó gente de machete fácil, cada vez les será más difícil mirar a otra parte. Kalilu y otros tantos están empeñados en no callar.
 

dimarts, 13 de novembre del 2012

ESQUERRA I PAÍS -Saïd El Kadaoui-, article al web de SOS Racisme


12 de novembre 2012
Aquests darrers dies he pensat força en el President Maragall i la seva agenda política.  Aquesta agenda que sintetitzava molt bé en el seu article La agenda incompleta de Maragall (El País, 28/02/2007) l’exconseller Josep Maria Vallés. Una societat on es combinés el progrés econòmic amb la cohesió social en el context d’una globalització que posa en risc el model social europeu, reformular la relació Catalunya, Espanya i Europa. Fet que requeria una revisió federalista de la constitució del 1978. Regenerar les institucions afavorint una major proximitat, més intel·ligibilitat i més participació i, finalment, concertació estable de l’esquerra catalana.
Aquesta agenda, incompleta per motius sobradament coneguts, està clar que requeria molt de coratge, generositat i intel·ligència.  I el que vam rebre va ser cepillados i sentències del tribunal constitucional que humiliaven a Catalunya . La revisió federalista de la constitució s’enfrontava i s’enfronta encara  a l’Espanya profunda, molta d’ella, en les files del PSOE.  Per tant és molt lògic, i inclús digne,que Catalunya s’hagi manifestat com ho ha fet a favor de la seva independència.
Pel que fa a la resta dels punts de l’agenda Maragall:
  • La combinació del progrés econòmic i la cohesió social, d’aquí a poc ens diran (de fet, ja ens ho estan dient), serà la veritable quimera i la regeneració de les institucions ja ha passat a millor vida.
  • La  concertació dels partits d’esquerres significa superar el narcisisme de les petites diferències que diria Freud i quelcom de molt més important, canviar les pesades inèrcies i burocràcies dels partits. Parlant clar: molts polítics sense càrrec.  Jo crec que és la única via perquè Catalunya tingui una alternativa d’esquerres que pugui fer contrapès a Convergència i Unió. I per mi aquesta és la gran pregunta: Serà capaç l’esquerra de superar aquest narcisisme de les petites diferències i s’erigirà en alternativa de govern?
Avui per avui sembla impossible: l’esquerra tradicionalment independentista està atomitzada, el PSC ha apostat clarament pel PSOE i sembla que hagi renunciat a ser alternativa de govern i iniciativa per Catalunya fa temps que es conforma amb ser un partit minoritari.
El passat dilluns 5 de novembre la seu del Col·legi de Periodistes a Barcelona, va ser  l’escenari d’un acte polític força engrescador. Amb el títol “Esquerra i País”, l’exvicepresident de la Generalitat i ex-president d’ERC, Josep-Lluís Carod-Rovira; l’eurodiputat d’ICV-EUiA, Raül Romeva, l’ex-conseller d’Ensenyament i ex-dirigent del PSC, Ernest Maragall, així com el filòsof Josep Ramoneda, debatien sobre l’actual situació política des de la parer de l’esquerra. Aquesta trobada pot convertir-se en l’espurna d’on naixerà la nova esquerra que molts anhelem per a aquest país? Tinc molts dubtes però, en tot cas, els meus millors desitjos.
Llegir l'article al web de SOS Racisme, clica 
Llegir més articles de “Mistos Electorals 25N 2012 Construïm una Catalunya antiracista

DIMARTS, 20 DE NOVEMBRE PARTICIPO AMB MATTHEW TREE I R. MARZOA ALS DIÀLEGS DE SOS RACISME


.
Una Catalunya que no dóna passaport a tots els que hi viuen, vinguin d’on vinguin, no valdrà la pena.
INFORMACIÓ POSTERIOR DE L'ACTE I DEL QUE VAFER UCFiR AL Blog de Xavier Rius, clica aquí per llegir-ho.

Fotografia de Juli Garzón
La propera edició dels Diàlegs Antiracistes es celebrarà el proper dimarts 20 de novembre a les 19h, a la Seu d’Òmnium Cultural (c. Diputació 276, Ppal. Barcelona)
La crida electoral pel proper 25 de novembre posa sobre la taula el dret de Catalunya a decidir el seu futur. Un esdeveniment històric que cal prendre amb la importància que mereix. Però precisament per això, és vital que el debat sigui profund. Cal que les propostes dels diferents partits polítics no es quedin en un missatge buit de contingut. És de vital importància introduir en aquest debat el model de país que volem construir, el model de societat pel que volem lluitar.

Des de SOS Racisme creiem que des de la ciutadania ens hem de plantejar quina és la Catalunya que volem, quines són les nostres condicions i les nostres exigències.
Ponents:
  • Matthew Tree, escriptor
  • Rita Marzoa, periodista i membre de la Junta d’Òmnium Cultural
  • Saïd El Kadaoui, psicòleg i escriptor
  • Presenta i modera Alba Cuevas, directora de SOS Racisme
Com a Fila Zero convidem als caps de llista de tots els partits polítics amb representació parlamentària per tal que exponguin quina resposta dóna el seu partit als fets que plantegem a la taula. Els representants partits confirmats són:
-       Josep Pera, CiU
-       Iolanda Pineda, PSC
-       Antonio Alcalde, PP
-       Montserrat Torres, ERC
-       Juan Carlos Villamizar, ICV-EUiA
-       Núria Cadenes, SI
-       Quim Arrufat, CUP
L’acte es retransmetrà en directe gràcies a l’associació Boca Ràdio. Es podrà escoltar a www.bocaradio.org o a la 90.1 FM (per Barcelona Nord).
L’assistència és lliure i gratuïta, però per qüestions d’aforament demanem que ens confirmeu assistència trucant al 93 301 05 97 o escrivint a comunicacio@sosracisme.org
Anar al web de SOS Racisme, clica

dilluns, 12 de novembre del 2012

Recomiendo Joseph Anton. Memorias. De Salman Rushdie

.

Cita:
 " << El acto de la emigración - escribió- lo pone en crisis todo en torno al individuo o grupo que emigra, todo en torno a la identidad y la individualidad y la cultura y la fe. Así que si esto es una novela sobre la emigración, debe equivaler a ese acto de poner en cuestión. Debe llevar a cabo la crisis que describe.>> Escribió: <<¿Cómo entra lo novedoso en el mundo?>>.
Y escribió: <<Los versos satánicos>>.
"

Entrevista a Salman Rushdie
http://lalineadefuego.info/2012/09/30/salman-rushdie-si-tuviera-que-volver-a-hacerlo-me-negaria-a-esconderme-diria-me-voy-a-casa-protejanme/

El Cultural.es <www.elcultural.es>
El 18 de septiembre Salman Rushdie lanzó en todo el mundo ‘Joseph Anton’ (Mondadori), un libro de memorias sobre los aproximadamente diez años que el autor pasó escondido, bajo protección policial, después de que Jomeini exigiese su muerte en 1989 porque su novela ‘Los versos satánicos’ fue considerada ofensiva para el islam. La fatwa fue revocada en 1998 y desde que se trasladó a Nueva York en 2000, Rushdie se ha convertido en un hombre con una gran vida social, amante de las fiestas.

En relación con la noticia reciente de que una fundación religiosa ha renovado la fatwa, escribía en un correo electrónico: “No me siento inclinado a magnificar este feo titular sensacionalista prestándole demasiada atención”. El mes pasado, antes de embarcarse en una gira de tres meses para promocionar tanto el nuevo libro como la próxima versión cinematográfica de su novela de 1981, Hijos de la medianoche, hablaba sobre Joseph Anton durante un almuerzo en un restaurante de la periferia del centro de Nueva York.
Pregunta. Todo esto pasó hace mucho tiempo. ¿Qué le ha hecho decidirse a escribir sobre ello tantos años después?
Respuesta. Fue en gran medida una cuestión de instinto. Durante mucho tiempo, no quise escribir este libro. Pensaba que sería muy triste tener que volver a introducirme emocionalmente en esa época y sumergirme en ella. Pero siempre supe que tendría que hacerlo. Pensé que el peso de los acontecimientos, su velocidad, la complejidad de lo que estaba pasando eran tan grandes que, aun teniendo la mejor memoria del mundo, no habría manera de recordarlo con detalle.
P. ¿Por qué la tercera persona?
R. Siempre había pensado que no quería que esto fuese un diario, ni una confesión, ni una perorata. No quiero que sea un libro de venganza, un libro de ajuste de cuentas. Sabía muchas cosas que no quería que fuese, pero no sabía lo que sí quería que fuese. Cada vez que lo intentaba, no funcionaba y lo dejaba a un lado. Y luego me di cuenta de que una de las cosas que realmente no me gustaban era la primera persona, ese interminable “yo”, las cosas que me pasaban a “mí” y “yo sentía” y “yo hacía” y “me preocupaban”. Simplemente, era algo absurdamente narcisista. Así que, en un momento determinado, pensé: “Vamos a ver qué pasa si lo escribo como una novela, en tercera persona”. Y, en el momento en que empecé a hacerlo, fue como el “ábrete sésamo” que me dio el libro.
P. Este recurso hace que, a veces, el libro se lea como una novela o, como usted mismo dice en él, como una novela mala de Rushdie, llena de melodrama y cosas surrealistas.
R. Una de las formas en que yo lo expresaba para mí mismo era diciendo que la imagen que yo tenía del mundo se había roto. Y entonces, de repente, se volvió

dijous, 8 de novembre del 2012

Journée d'études "Narrer l'identité au sein des sociétés du XXIe siècle"


L'équipe de recherche interlangues : mémoires, identités, territoires (ERIMIT) propose, en collaboration avec le laboratoire IDENTI.CAT de l'Universitat Oberta de Catalunya, une journée d'études sur le thème "Narrer l'identité au sein des sociétés du XXIe siècle" le 16 novembre 2012, dans la salle Léonard du bâtiment A.
Le but de cette journée d'études est d'explorer l’interface plurilinguisme – identité(s) culturelle(s), collective et individuelle(s), au sein de la société catalane au tournant du XXIe siècle.
Cette étude sera proposée à partir de la production écrite, en catalan et/ou en espagnol, de personnes qui, ayant une histoire individuelle ou familiale de migration, habitent actuellement en territoire catalan et ont adopté ces deux langues comme langue(s) de création.
Pour observer ces identités, la réflexion sera concentrée sur la production littéraire de fiction et les essais de ces auteurs. Il sera accordé une attention particulière à l’étude des discours sur les identités (production et réception). Une interrogation sera portée sur l’articulation entre les identités individuelles et les identités collectives.
Par leurs visions du monde, sont-ils devenus des agents actifs de changement au sein de la société catalane ?
Quelle place ont-ils accordé dans leurs ouvrages aux différentes langues parlées en Catalogne ?

Auteurs et chercheurs invités : Pius Alibek, Guillem Calaforra, Josep A. Fernàndez, Patricia Gabancho, Said el Kadaoui.


Leer en la web de la Universidad de Rennes.

Abrir el pdf y leer mi intervención en las jornadas

dimarts, 30 d’octubre del 2012

INTERSECCIONS, Els reptes de la inclusió en societats multiculturals, Sant Boi

Els reptes de la inclusió en societats multiculturals

Edició 2012

Programa

9 h
Benvinguda, inauguració de la Jornada

9.30 h
Conferència inaugural: Psiquiatria transcultural en Espanya: estat de la qüestió, a càrrec de Josep Maria Comelles, doctor en Antropologia de la Universitat Rovira i Virgili de Tarragona

10.15 h
Taula rodona: Identitat i pertinences. Pràctiques culturals inclusives amb persones d'altres cultures amb problemes de salut mental
  • L'acció comunitària en salut al barri del Raval: la salut mental, una prioritat consensuada, a càrrec de la  Carmen Fuertes i Belén Ugarte
  • El jardí de les cultures, a càrrec de Salvador Simó, terapeuta ocupacional i  doctor en Educació Inclusiva
  • Adolescència i migracions, a càrrec de Saïd El Kadaoui Moussaoui, psicòleg de l'Hospital de Dia d'Adolescents de Gavà (Fundació Orienta) i escriptor

11.15 h - Coffee Break

12 h
Taula rodona: Pràctiques assistencials en el territori
  • Serveis de consulta cultural: la tercera via, a càrrec de Francisco Collazos, coordinador del Programa de Psiquiatria Transcultural de l’Hospital Universitari Vall d’Hebron de Barcelona
  • Immigració: perdre per guanyar, a càrrec de Marcel Ventura, psiquiatra, psicoanalista i psicòleg
  • Bones pràctiques inclusives en l’àmbit local, a càrrec de Yolanda Osorio, coordinadora del Programa d’Atenció en Salut Mental per Població Immigrada (SATMI) del Parc Sanitari Sant Joan de Déu per al Baix Llobregat

13.15 h - Dinar

15 h
Sant Boi: bones pràctiques en cultura, salut mental i inclusió: el programa Torrents d’Art

16 h
Conferència de cloenda: L’economia acadèmica com a font d’empobriment intel·lectual i psíquic, a càrrec de  Federico Aguilera Klink, catedràtic d’Economia Aplicada de la Universitat de La Laguna

17 h
Cloenda de la Jornada

17.30 h
Projecció de la pel·lícula Poniente (2002), de Chus Gutiérrez, i cinefòrum posterior a càrrec de l’entitat Equilibri
 

Inscripcions


Les inscripcions es poden fer des del dia 5 d’octubre fins al dia 26 d’octubre a la plana web de l’Ajuntament de Sant Boi. www.santboi.cat , on trobareu, també, més informació sobre els i les ponents i les taules rodones

Per qualsevol dubte o aclariment podeu adreçar-vos al correu electrònic interseccions@santboi.cat

Més informació al web municipal

Informació


La jornada tindrà lloc a l’Auditori del Parc Sanitari de Sant Joan de Déu. C/ Doctor Antoni Pujadas, 42
08830 Sant Boi de Llobregat

Els assistents inscrits a la Jornada podran dinar a preu reduït en la cafeteria del Parc Sanitari.

L’acte comptarà amb Intèrpret de
llenguatge de signes
. Si teniu alguna altra
necessitat d’accessibilitat, poseu-vos en
contacte amb l’Oficina d’Inclusió Social
Tel: 93 635 12 00 ext. 424
Fax: 93 654 37 52
programadiscapacitats@santboi.c


nterseccions, any II


Interseccions va néixer el 2011 com a jornada dedicada a explorar la pràctica cultural entesa com a eina al servei de les dinàmiques assistencials en l’àmbit de la salut mental i, en general, de les polítiques d’inclusió social

L’edició 2012 de la Jornada abordarà des de diferents perspectives (antropològica, cultural, clínica i terapèutica) la pràctica assistencial amb persones d’altres cultures amb problemes de salut mental. En les nostres societats multiculturals, l’exclusió social i, en molts casos, la malaltia mental de les persones nouvingudes són problemàtiques cada vegada més esteses, agreujades avui dia per la crisi econòmica.

La Jornada s’adreça a professionals dels àmbits de la cultura i la salut mental i també a aquells/es altres que desenvolupen la seva activitat dins de les àrees de serveis socials de les diferents administracions públiques o institucions privades, així com al públic universitari relacionat amb les temàtiques abordades.


Comitè científic

Montserrat Toribio
Terapeuta Ocupacional de la Unitat de Subaguts
Parc Sanitari Sant Joan de Déu

José María Otín
Coordinador Unitat Subaguts i SERPI
Parc Sanitari Sant Joan de Déu

Àrea de Benestar i Ciutadania
Ajuntament de Sant Boi



Comitè organitzador

Àrea de Benestar i Ciutadania de l'Ajuntament de Sant Boi

Sr. Francesc Vilurbina, Director Mèdic del Parc Sanitari Sant Joan de Déu

Sr. Josep Treserra, Director Mèdic de l'Hospital Benito Menni de Sant Boi
Anar al web d eles jornades

dilluns, 29 d’octubre del 2012

RECOMIENDO EL ARTÍCULO "MAALOUF Y LA NOSTALGIA DEL PORVENIR"

Javier Valenzuela, El País, 23 de octubre de 2012
Amin Maalouf, que está en Madrid presentando Los desorientados (Editorial Alianza), su última novela, sigue con preocupación las noticias de Líbano, su país natal. “¿Qué es lo último?”, pregunta nada más estrecharnos la mano en un despacho de la Casa Árabe. “Parece que se multiplican los llamamientos a la calma, que ninguna de las partes quiere lanzarse a un conflicto incontrolable”, le respondo. Y añado: “Por el momento”. Maalouf carraspea —anda acatarrado— y dice: “Sí, cada vez va a resultar más difícil aislar a Líbano del conflicto sirio, los riesgos de extensión son enormes y crecientes”.
El escritor está manifiestamente entristecido. Por lo que ahora ocurre en Líbano y por lo que ocurre en los últimos años en Europa y en todo el mundo. Y eso también se nota en Los desorientados. Maalouf cuenta en esa novela una historia que podría ser la suya: la del regreso a su país natal de Adam, alguien que lleva cinco lustros fuera, la del reencuentro de Adam con sus amigos de juventud y la evocación común de todas las cosas que se han perdido y todas las traiciones que se han cometido, la de la constatación de que todas las existencias solo son un exilio.
Al final de la novela se dice que la vida de Adam está “en suspensión, como su país, como este planeta, como todos nosotros”. Sí, el mundo está en suspensión y se extiende el sentimiento de que va a terminar cayendo del lado malo. Por primera vez en su existencia, la generación de Maalouf, la que nació en mitad del siglo XX, tiene la impresión de que podría vivir los horrores que padecieron sus padres.
“Me acuerdo con frecuencia de Stefan Zweig, que, dada la evolución de la Europa de su tiempo, llegó a la conclusión de que aquel mundo ya no era el suyo”, dice Maalouf. “Sentía que ya no había ninguna escapatoria, así que terminó suicidándose tras un acontecimiento que hoy nos parece muy secundario: la caída de Singapur, en 1942. Ahora muchos compartimos el sentimiento de que no hay luz al final del túnel, pero la hay, aunque no la veamos. Ahora bien, ¿es posible que tengamos que vivir años de locura y de violencia antes de llegar a la sabiduría? Es posible. Hizo falta el horror de los años treinta y la II Guerra Mundial para que Europa dijera ‘basta’. Puede que el destino de la humanidad sea tener que estrellarse contra el muro para sentir así su dureza y buscar otra salida”.
 Estoy en contra del multiculturalismo en el que cada cual vive en su gueto

En 2010 Amin Maalouf firmó una petición para que el Príncipe de Asturias de la Concordia les fuera concedido a los moriscos expulsados de su tierra en los siglos XVI y XVII. No lo consiguió, pero él recibió ese año el Príncipe de Asturias de las Letras. Nacido en Beirut en 1949, instalado en Francia para escapar de las guerras que desangraron Líbano en los años setenta y ochenta, escritor en la lengua de Molière, ganador del Goncourt en 1993 y miembro de la Academia Francesa desde el pasado verano, sus ensayos y novelas siempre han sido coherentes en la defensa del mestizaje en democracia, de la asunción de las muchas identidades con las que cargamos la mayoría.
Su primer gran éxito, la novela León el Africano, versa sobre un granadino, Hasan ben Muhamad al Wazzan, que tuvo que abandonar su ciudad porque allí se imponía a sangre y fuego la voluntad uniformadora de los Reyes Católicos y su Inquisición. Cinco siglos después, las cosas no son tan diferentes. Resurgen aquí y allá los fundamentalismos religiosos y nacionales, y se desvanecen las esperanzas en que el mundo acepte a individuos como Maalouf, a la vez libanés y francófono, de origen grecocatólico y defensor de los valores laicos y democráticos, árabe y europeísta, mediterráneo y ciudadano del mundo.
“Vivir juntos es cada vez más difícil”, suspira. “En el mundo árabe, la situación de las minorías es cada vez más precaria y hay una polarización comunitaria, como la que opone a chiíes y suníes, que no se conocía desde hace siglos. Y en Europa aumenta la impaciencia respecto a los musulmanes. Lo vemos incluso en sociedades con una gran tradición de apertura como Dinamarca y Holanda, que se están convirtiendo en tensas y desconfiadas. Esos dos movimientos se alimentan mutuamente, y la gente como yo se siente cada vez más inquieta, por no decir desesperada”.

Respira hondo y prosigue: “Pero no me rindo. Vivir juntos es algo muy complicado, que necesita ser gestionado con sutileza, lucidez y perseverancia. No es algo que se produzca espontáneamente, ni algo que quede solucionado de una vez por todas. Pero es indispensable para evitar esa pesadilla hacia la que nos dirigimos”.
—Quizá ya estemos ahí, en esa pesadilla —le digo—. Además del ascenso del espíritu de tribu, sufrimos la ley de la jungla en las relaciones económicas y sociales.
—Sí, las sociedades europeas viven una profunda crisis ligada al retroceso de los valores de solidaridad y bien común. Gestionar la coexistencia de gente que viene de culturas diferentes, es explosivo. Pero debemos hacerlo.
—¿Cómo?
—Lo primero es saber en qué condiciones vivimos juntos, qué es lo permisible y qué no lo es. El hecho de aceptar los otros no quiere decir aceptar cualquier cosa. Yo no estoy a favor del multiculturalismo entendido como que cada cual viva en su gueto y a su manera, estoy a favor de la integración. A favor del respeto de la dignidad del ser humano y del progreso social, no del respeto de las tradiciones. Europa debe dirigirse a los ciudadanos, no organizar las relaciones entre las tribus.
En Los desorientados, hay un momento en el que alguien dice: “El país del que tengo nostalgia no es el pasado, es el porvenir”. Maalouf cree que su generación tiene razones para la nostalgia. “Se es nostálgico de todos los sueños que se han tenido y no se han realizado”, dice. “Y hay ideales indispensables que nosotros hemos tenido y ahora son rechazados: los de solidaridad y de igualdad. Estamos en un mundo donde la desigualdad es promocionada como una forma de modernidad. Aún estamos en la resaca de la debacle del comunismo: se continúa considerando que todos los valores que fueron predicados, y luego travestidos, por la experiencia comunista deben ser invertidos. Esa es una receta para la destrucción del tejido social. Haría falta que el péndulo volviera al centro: ha ido de un extremo a otro y debería volver al centro”.

Leer en El País, pincha aquí.

OBRAS DE MAALOUF:

 Las cruzadas vistas por los árabes (1983). Ensayo sobre las guerras de religión, dio a conocer a Maalouf.
 León el Africano (1986). Novela la vida de Hassan, “un hijo del camino” entre el islam y el cristianismo.
 
La roca de Tanios (1993). Novela premiada con el Goncourt sobre la reconciliación religiosa.
Identidades asesinas (1998). Un ensayo contra la tentación fanática del nacionalismo y la religión.